A mediados de los años 40 surge en EEUU un nuevo sistema filosófico a través de las novelas «The Fountainhead» (1943), traducida al castellano como «El Manantial», y «Atlas Shrugged» (1957), como «La Rebelión de Atlas», ambas escritas por Ayn Rand. Este sistema es el objetivismo (no confundir con el objetivismo de los pre-socráticos), el cual afirma que a la realidad (naturaleza de las cosas) solo se la domina obedeciéndola, que el propósito moral de la vida es la búsqueda de la propia felicidad o el «interés propio racional»; y que el único sistema social acorde con este fin es el capitalismo puro (llamado también capitalismo laissez-faire).
Rand, militó y apoyó al partido republicano creando así un grupo político llamado «el colectivo» desde el cual se promovía las ideas del objetivismo y su oposición al intervencionismo por parte del estado en la economía. En este grupo estaba Alan Greenspan quien fue su alumno más destacado, llegando a ser el consejero económico del presidente Gerald Ford y con Ronald Reagan, en 1987, presidente de la reserva federal de los Estados Unidos. Greenspan fue uno de los principales economistas en desregularizar la economía norteamericana.
Los bloques fundamentales del objetivismo son:
Metafísica: La tarea de la conciencia del hombre es percibir la realidad, no crearla o inventarla. Así, el objetivismo, rechaza toda creencia en lo supernatural, y cualquier aclamación de individuales o grupos que dicen crear su propia realidad.
Epistemología: razón. La razón es el único medio del hombre para adquirir conocimientos. Así, el objetivismo, rechaza al misticismo (no acepta a la fe y a los sentimientos, como medios de conocimiento); y al escepticismo (que proclama la imposibilidad del conocimiento y/o estar seguro de algo).
Ética: egoísmo «racional». La virtud básica del hombre es su racionalidad, y sus tres valores fundamentales son: razón, propósito, auto-estima. El hombre es un fin en sí mismo, y no un medio para los fines de los demás; debe vivir por su propio propósito, sin sacrificarse para otros o sacrificar a otros para sí; debe trabajar por su propio interés racional y lograr su propia felicidad como el propósito moral más alto de su vida. Así, el objetivismo, rechaza cualquier forma de altruismo (que dice que la moralidad consiste en vivir para otros o para la sociedad).
Política: capitalismo. El sistema político económico ideal es el capitalismo laissez-faire. Es un sistema en el cual los hombres tratan unos con otros no como amos y esclavos, sino como comerciantes, mediante intercambio libre y voluntario, en beneficio mutuo. Es un sistema en el cual ningún hombre puede obtener ningún valor de otro mediante el uso de la fuerza física, y ningún hombre debe iniciar el uso de la fuerza física contra otros. El gobierno actúa exclusivamente como policía, protegiendo los derechos de los hombres solo en represalia y solo contra aquellos que inician el uso de la fuerza física, tales como criminales o invasores extranjeros. En un sistema de capitalismo puro, debe haber una separación total entre el estado y la economía, en la misma manera y por las mismas razones que en el caso de la separación entre la iglesia y el estado.
Según Ayn Rand, el capitalismo puro es el sistema económico más productivo que existe y el que generó mayor bienestar. Pero, decía, este no debe ser el motivo principal para defenderlo. Según Ayn Rand, el capitalismo debe ser defendido prioritariamente en términos morales, no prácticos. Y el principio de esta moral sería el respeto a la libertad de todos los individuos, que se relacionan y cooperan de forma voluntaria y no impuesta.
Como síntesis del objetivismo podemos decir que se caracteriza por una defensa férrea a la razón. En este punto no aporta nada nuevo, pues esta era una postura que ya defendía Aristóteles. En la ética defiende un egoísmo racional carente de sentido pues se olvida la autora que hemos sobrevivido como especie gracias a nuestra colectividad y valores derivados de esta como son la solidaridad o la empatía. No se puede ver cualquier iteración social como una mera transacción, donde el beneficio debe ser mutuo siempre. Hay situaciones donde esa premisa no se puede cumplir, entonces si no obtengo beneficio, ¿debería ayudar a un desconocido o una desconocida que estuviese necesitado o necesitada? Según Rand no, nunca. Cualquier acto de altruismo es inmoral. Somos seres complejos con sentimientos y percepciones subjetivas, cada uno tiene su particularidad y su forma de ser. No puedes tachar a un ser inmoral por ayudar al prójimo en un momento puntual.
En cuanto a la religión, Ayn Rand no es creyente. Sin embargo, critica al misticismo del budismo(religión milenaria) y a la vez reza: «no hay alturas que el hombre no pueda alcanzar, no hay metas inalcanzables». Para Rand, Dios es el hombre.
En el terreno político-económico, nos incita al capitalismo salvaje (el capitalismo de ‘dejar hacer’), el mismo que nos ha llevado a varios colapsos mundiales(ver el crac del 29 o la crisis financiera del 2008, entre otras burbujas financieras) y el mismo que no practica un comercio libre pues los estados mas poderosos someten a otros mediante aranceles abusivos o sanciones económicas según conveniencias. Ayn Rand olvida también, al colonialismo y al imperialismo practicado por estos países que invaden otros países saqueando sus riquezas, siendo Estados unidos un claro ejemplo de ello. Además la moralidad del capitalismo que según la autora debe ser el valor más importante es cuanto menos irrisorio pues en países como India, Pakistán o países de África se sigue esclavizando a niños para que los grandes capitalistas sigan aumentando su riqueza. Ayn Rand se refiere al capitalismo como «el capitalismo no condunce a la guerra, es el sistema de la paz».
En el objetivismo, los derechos fundamentales de las personas como son la vivienda, el trabajo o la salud pública no tiene cabida. No es de extrañar que esta ideología tuviera tan buena acogida entre la oligarquía y los grandes empresarios de este país. Se sabe, por ejemplo, que el manantial es uno de los libros referentes de Donal Trump o del millonario Elon Musk y que llegó a ser en los años noventa el segundo libro más influyente de EEUU después de la biblia.
A pesar del pobre aporte filosófico(realmente solo aporta el ideal del egoísmo racional y una defensa contradictoria del capitalismo) y, a pesar de no ser una buena novelista supo ganar influencia en la sociedad y la economía americana. Esta influencia queda demostrada a través de la aceptación del egoísmo como virtud en la sociedad, de la desregularización económica y de la implantación de sistemas públicos deficientes en virtud de la empresa privada.
Fuentes:
https://www.objetivismo.com/index2.php
https://www.eldiario.es/internacional/theguardian/ayn-rand-trump-silicon-valley_1_3454220.html
F+ Esencia objetivista: la filosofía de Ayn Rand
https://www.youtube.com/watch?v=4EfcgTOv_rM (entrevista 1967)
El objetivismo y sus problemas (I)
El objetivismo y sus problemas (y II)
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